Tu oficina en tu bolsillo

Cada día es más habitual encontrar empresas que ofrecen la posibilidad de combinar el trabajo en la oficina con jornadas de teletrabajo. O estar fuera de la oficina en una reunión o viajando y necesitar acceder a recursos internos de la empresa como correo electrónico, servidores de ficheros, webs internas, etc. ¿Qué podemos hacer para trabajar como si estuviéramos en la oficina estando fuera de ella?
Las VPN o redes privadas virtuales nos ofrecen esta posibilidad. Gracias a ellas nos podemos conectar a la red interna de la empresa y acceder a sus recursos como si estuviéramos físicamente en ella. Y además, con los smartphones y las tabletas, ya no necesitamos un ordenador portátil para utilizarlas. Este tipo de dispositivos móviles nos permiten configurar una VPN para conectarnos a ella en cualquier momento y desde cualquier lugar.
También pueden utilizarse este tipo de redes para interconectar las distintas sedes de la empresa que se encuentren geográficamente separadas, sin tener que contratar una línea de conexión dedicada en exclusiva.
Entre otras ventajas la VPN cifra el tráfico que se envíe por ella, por lo que podremos conectarnos a redes no confiables de forma segura. Esto nos permitirá por ejemplo utilizar wifis públicas con confianza.
Además del cifrado de los datos, una red privada virtual permite añadir una capa de seguridad extra en la red de la organización ya que todos los usuarios que la utilicen tendrán que iniciar sesión y se podrá llevar una trazabilidad de las acciones que realicen, además de establecer restricciones de acceso en función del usuario conectado. Y es fácilmente escalable, por lo que el número de usuarios que la utilizan puede crecer al mismo ritmo que crezca la empresa.
A continuación se explican los sencillos pasos a seguir para configurar de forma segura una VPN en un dispositivo móvil. Una vez los usuarios tengan los datos de la conexión (servidor, usuario y contraseña), podrán añadir la red a su dispositivo y utilizarla siempre que sea necesario.