Aprende a comunicarte mejor en Internet.

Fecha de publicación 08/04/2019
Imagen decorativa Comunicación inadecuada

Para tener una experiencia positiva en Internet es necesario asumir responsabilidades y aplicar buenas prácticas, protegiéndonos frente problemas de privacidad, grooming, ciberacoso, o los riesgos del sexting, entre otros.

 

Para los menores, una de las principales utilidades y oportunidades de Internet es la comunicación con otras personas (Net Children Go Mobile). Así lo demuestra el hecho de que un 76% de los jóvenes a partir de los 15 años utilicen mensajería instantánea, un 78,5% el correo electrónico, y un 92,5% de quienes disponen de smartphones o tabletas, utilicen aplicaciones de mensajería tipo WhatsApp (Panel de Hogares ONTSI).

Para que estas actividades sean agradables y provechosas, es necesario saber comunicarse adecuadamente, también en Internet. De esta manera, será más sencillo prevenir riesgos como los daños a la privacidad, las consecuencias negativas del sexting, o problemas como el grooming o el ciberacoso. Además, en el caso de encontrarse frente a una de estas problemáticas, poseer buenas habilidades comunicativas será de gran utilidad para poder actuar adecuadamente, minimizar los daños y gestionar la situación.

Una mala comunicación en Internet puede traer problemas

Si en persona podemos tener equívocos y malentendidos, en Internet resulta aún más sencillo. La comunicación en línea es muy rápida, casi instantánea. Nos conecta con cualquier persona, no importa lo cerca o lejos que esté. La información que se comparte puede permanecer en la Red durante mucho tiempo y extenderse a muchas personas con las que no se contaba, en muy poco tiempo, que es lo que se conoce como contenido viral.

Imagen blog cara de sorpresa chicas jóvenes

Así pues, si enviamos un mensaje que pueda malinterpretarse fuera de su contexto, llegará rápidamente, y permanecerá disponible durante un tiempo ilimitado, dando lugar a otras futuras interpretaciones.

De hecho, compartir una foto, asignar una valoración o poner un comentario es extremadamente sencillo, pero si nos arrepentimos y decidimos quitarlo o eliminarlo por completo de la Red, puede llegar a resultar muy difícil. En cuanto se envía una información a otra persona, esta puede compartirla con otras, se puede guardar en copias de seguridad automáticas o puede llegar a ser indexada por los buscadores.

Por otra parte, la Red nos permite relacionarnos con muchas personas, ampliando notablemente nuestros círculos sociales. Sin embargo, es imposible estar completamente seguros/as de quién es realmente la persona que está al otro lado de la pantalla.

Ejemplos de comunicación inapropiada, ¿hay alternativa?

Casos de comunicación inapropiada en Internet hay muchos. Veamos algunos ejemplos relativamente comunes sobre las posibles problemáticas que pueden traer asociadas y de qué otra manera se podrían gestionar:

Icono

Ejemplo

Posible problema

Alternativas

Icono compartir

 

Compartir un exceso de información sobre sí mismos/as.

 

Desvelar la localización, rutinas y horarios, con la consiguiente pérdida de privacidad, riesgos físicos, etc.

Compartir una foto o una situación embarazosa que puede dar pie a humillaciones en línea, ciberacoso, etc.

 

Perfil privado.

Restringir contactos.

Reflexionar sobre las posibles consecuencias antes de compartir.

Icono no mensajes

 

Participar en bromas en línea que molestan a otras personas (tratando de ser parte del grupo).

 

Ofender, humillar, insultar a otras personas, reforzar el miedo a los acosadores, extender el problema, agravándolo y llevándolo a más personas: ciberacoso.

 

No dar a “me gusta”, ni compartir esos mensajes. Si molestan a otra persona no son una broma.

Apoyar a la víctima.

Mostrar rechazo ante esos mensajes.

Hablar con un adulto de confianza.

Icono alerta

 

Escribir mensajes, y responderlos, de forma rápida, directa e incluso agresiva.

 

Resultar brusco, desagradable o agresivo. Problemas de netiqueta.

Responder en caliente, caer en insultos, ofensas o derivar en una situación de ciberacoso.

 

Ser tolerantes al leer un mensaje. Dejar abierta la puerta de la duda ante posibles equivocaciones o interpretaciones diferentes.

Dejar tiempo para la reflexión antes de dar una respuesta.

 y de forma constructiva.

Icono stop

 

No rechazar las peticiones de otras personas (incluso cuando no se sienten cómodos/as).

 

Acabar dando datos personales o privados con la consiguiente pérdida de privacidad.

Enviar fotos con connotación sexual, pudiendo ser explotadas tras un sexting.

Aceptar fotos ofensivas, mensajes dañinos, ciberacoso, etc.

 

Reforzar la autoestima y confianza en sí mismos.

Responder asertiva y empáticamente a los demás.

Saber decir que no.

Icono comunicación

 

Contarle confidencias a una nueva amistad en línea.

 

Que la otra persona no sea quien dice ser y las utilice para amenazarle, chantajearle económica o sexualmente (grooming).

Utilizar esa información para captarle hacia una comunidad peligrosa.

 

Ser precavido/a ante personas desconocidas en línea.

Por mucho que les tratemos, si solo les conocemos de Internet, siguen siendo desconocidas. Es muy fácil engañar en línea.

Valorar la propia privacidad. No desvelar detalles privados.

Una buena comunicación mejora las relaciones sociales

Recordemos que la manera en que nos comunicamos, agresiva, pasiva, empática, asertiva, etc., refleja nuestra forma de ser. En consecuencia, merece la pena hacer un esfuerzo por comunicarnos mejor con los demás, para relacionarnos adecuadamente y de este modo, además podremos mejorar la percepción que los demás tienen sobre nosotros.

Es nuestra responsabilidad comunicarnos y responder adecuadamente, también en Internet, independientemente de lo que los demás nos puedan decir y la manera en que se comuniquen con nosotros. Que otra persona se dirija a nosotros de manera ofensiva no nos da carta blanca para rebajarnos a ese nivel y entrar en una espiral de comunicación inapropiada.

Imagen blog selfie de jóvenes

Al contrario, ser conscientes de nuestros propios sentimientos, reconocer los de la otra persona, y tener confianza en nosotros mismos nos ayudará a mantener una comunicación apropiada con la que podemos desmontar la mala actitud de nuestro interlocutor, o al menos evitar que nos resulte más dañina.

Como acabamos de ver, cuando se plantea una situación de comunicación inadecuada, siempre hay alternativas. Conocer los riesgos, aplicar el sentido común, y emplear unas buenas habilidades sociales y comunicativas nos permitirá reducir el número de problemas a los que nos enfrentemos en Internet, así como su gravedad, siendo más eficaces y disfrutando mucho más de nuestras relaciones sociales a través de Internet.

Como padres, madres, tutores o educadores/as, hemos de ser conscientes de la importancia de una buena comunicación. Al transmitírselo a los menores, día a día, desde pequeños, o al trabajarlo en el aula con nuestras Unidades Didácticas, se irán acostumbrando a relacionarse de forma positiva y les será más fácil evitar y superar los problemas que se encuentren en línea.

Y ahora os toca a vosotros, ¿qué os parece este tema?, ¿creéis que en general sabemos comunicarnos con los demás por Internet? ¡Esperamos vuestros comentarios!