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Exploramos los riesgos de las imágenes temporales en Internet

Fecha de publicación 15/10/2025
Imagen - Exploramos los riesgos de las imágenes temporales en Internet

En la actualidad, algunas redes sociales han introducido funciones que permiten enviar fotografías y videos que desaparecen después de ser vistos una sola vez. Aunque esta característica puede parecer una medida de privacidad, es esencial que conozcamos los riesgos asociados.

¿Qué son las imágenes temporales?

Las imágenes temporales son archivos multimedia que se eliminan automáticamente después de ser visualizados por el destinatario. Plataformas como Snapchat popularizaron esta función, y otras como WhatsApp, Instagram y Telegram la han incorporado posteriormente. El objetivo es permitir a los usuarios compartir contenido sin que este permanezca en el historial de conversaciones.

Este tipo de imágenes pueden ser muy útiles en nuestro día a día, ya que al eliminarse tras ser vistas, ayudan a liberar espacio en el dispositivo y evitar que se acumulen en la memoria caché. Además, el hecho de no ser visibles en el chat puede ayudar también a controlar la privacidad de nuestras conversaciones. No obstante, debemos tener en cuenta que existen una serie de riesgos asociados a este tipo de imágenes.

Riegos asociados a las imágenes temporales

Existen una serie de riesgos que pueden conllevar el hecho de compartir imágenes, aunque estas sean solo temporales:

  • Falsa sensación de seguridad: aunque el contenido desaparece después de ser visto, el receptor puede realizar capturas de pantalla o grabaciones de pantalla sin que seamos notificados. Esto significa que el contenido puede ser guardado y compartido sin nuestro consentimiento. Aunque las aplicaciones más utilizadas que disponen de este servicio (WhatsApp, Instagram, Telegram…) ya han incluido funcionalidades actualizadas para evitar que se pueda realizar una captura de pantalla o una grabación, ya sea con aplicaciones externas o con las propias del dispositivo, hay que tener en cuenta que la otra persona puede, a través de otro dispositivo, realizar una fotografía o video al visualizar el contenido.
  • Exposición a situaciones no deseadas: cabe la posibilidad de que el contenido que recibamos no sea de nuestro agrado. Por ejemplo, una persona de un grupo puede enviar contenido pornográfico, y este quedaría eliminado de la conversación/grupo en el que se encuentre. A priori, parece una ventaja, ya que no lo volveremos a ver más, pero en caso de que alguien nos acose, o mande contenido que no nos gusta de forma reiterada, no quedaría constancia de lo mismo, por lo que, no deberíamos apresurarnos en abrir cualquier tipo de mensaje que recibamos.

    Hay que tener claro qué queremos compartir y qué queremos recibir, y pedir ayuda ante situaciones de riesgo.

  • Situaciones de riesgo: puede pasar que, adultos haciéndose pasar por personas de nuestra edad, establezcan una relación de confianza para luego solicitarnos imágenes íntimas, dándonos esa falsa sensación de confianza pensando que “no pasa nada porque es temporal”. Una vez obtenidas, estas imágenes pueden ser utilizadas para chantajearnos, exigiendo más contenido o incluso dinero, bajo la amenaza de difundir las imágenes previas. Además, pueden acabar en grupos o comunidades peligrosas, donde se difunda contenido inadecuado, como pornografía o violencia explícita, donde se pueden enviar archivos de una sola visualización, protegiendo a los ciberdelincuentes.
  • Problemas asociados a la salud mental: la exposición de imágenes en redes sociales puede afectar negativamente a la autoestima y a la salud mental, especialmente si estas imágenes son utilizadas para chantajearnos, humillarnos o acosarnos. Por ello, es clave pedir ayuda en este tipo de situaciones.

Recomendaciones para el uso de imágenes temporales

Debido al gran impacto que tiene la comunicación en Internet en la actualidad, es fundamental tener una educación digital desde edades tempranas. Para ello, es necesario conocer los peligros de Internet, así como las formas para protegerte de ellos realizando un uso seguro mientras te comunicas en la red.

  • Diálogo y ayuda: mantén una comunicación abierta con tus padres o maestros sobre los peligros de compartir contenido en línea, incluso en plataformas que ofrecen funciones de "visualización única". En caso de que exista algún problema, ellos son las primeras personas que pueden ayudarte. También puedes encontrar ayuda llamando a la línea de ayuda del 017.
  • Desarrolla un espíritu crítico: piensa dos veces antes de compartir una imagen temporal evitando aquellas que contengan información personal, ya sea tuya o de otras personas, previniendo y detectando situaciones de ciberacoso.
  • Configuración de privacidad: revisa y ajusta las configuraciones de privacidad de tus dispositivos y aplicaciones, limitando quién puede ver tus mensajes o tu contenido.
  • Fomenta tu autoestima fuera de las redes: incentiva las actividades fuera de línea que refuercen tu confianza y autoestima, reduciendo la dependencia de la validación en Internet.
  • Reporta: si encuentras cualquier tipo de contenido inadecuado, como, por ejemplo, cualquier contenido de abuso sexual infantil, puedes reportarlo a través de plataformas como el formulario de la hotline.
  • Recursos educativos sobre sexting y privacidad digital: hablar sobre sexting, privacidad digital y las implicaciones de compartir imágenes personales en línea es importante para un uso responsable de las tecnologías.

Si consideras que estás recibiendo imágenes temporales de forma insegura o te estás enfrentando a alguna situación relacionada con la seguridad digital en este ámbito, pide ayuda. Contacta con la Línea de Ayuda en Ciberseguridad de INCIBE, un servicio gratuito y confidencial, a través de una llamada al 017, WhatsApp (900 116 117) o Telegram (@INCIBE017).

Línea de Ayuda en Ciberseguridad de INCIBE 017