Ciberacoso, sexting… motivos para hablar de la serie “Por trece razones”

Fecha de publicación 08/06/2017
Ciberacoso, sexting… motivos para hablar de la serie “Por trece razones”

Si convives con adolescentes, es bastante probable que hayas oído hablar de la serie “Por trece razones”, que se emite desde el mes de marzo en la plataforma Netflix. Esta serie ha generado críticas diversas, y cierta polémica acerca de sus contenidos. Veamos de qué trata.

 

Según la clasificación por edades de Netflix, y otras entidades dedicadas a la clasificación de contenidos como Common Sense Mediaesta serie no está recomendada para menores de 16 años.
Además, siempre se debe valorar de forma independiente la madurez emocional y capacidad de comprensión del menor antes de que visualice este tipo de contenidos.

La serie televisiva Por trece razones está basada en el libro homónimo de J. Asher, publicado en 2007. Relata la historia de Hannah Baker, una adolescente que decide terminar con su vida, dejando trece cintas de casete en las que explica sus razones para hacerlo. El objetivo es mostrar a las trece personas que las reciben que todos, de una u otra forma, están vinculados en las situaciones a las que Hannah se ha enfrentado. De este modo, a lo largo de trece capítulos se habla de multitud de problemáticas que afectan a los adolescentes.

La controversia ha surgido precisamente a raíz de algunas de estas temáticas. Por trece razones incluye contenidos complejos para los menores, como el consumo de drogas, la violación o el suicidio, que aparecen representados de forma explícita. Pero también trata sobre la presión social de amigos o compañeros de instituto, las actitudes sexistas y otros muchos temas relacionados con el día a día de los adolescentes, que nos conviene conocer.

 

“Esto ha de parar, tenemos que cambiar la forma en que nos tratamos unos a otros,
y cuidarnos más”, Clay (Por trece razones)

 

Además, a diferencia de la novela, la serie de televisión incorpora el contexto tecnológico actual que rodea a los adolescentes que, aunque facilita la comunicación, añade más complejidad en cuanto a convivencia y los conflictos que puedan surgir en ella. De hecho, móviles y redes sociales son el medio de los personajes para comunicarse. Se dan situaciones de ciberacoso y sexting, mostrando también aspectos como el alcance de la viralidad en Internet y sus consecuencias, la pérdida de privacidad o el peso de la reputación online. A lo largo de todos los capítulos, se pone de manifiesto que el valor del apoyo y el respeto entre compañeros es clave para prevenir estas problemáticas.

Respecto a los adultos, la serie da un toque de atención, dejando entrever en numerosas situaciones que es necesario escuchar lo que los adolescentes tienen que decir, siendo para ello imprescindible conocer su entorno, los problemas a los que se enfrentan y qué lenguaje utilizan. Las diferentes perspectivas de las familias y del centro educativo ante los problemas que muestra la serie, transmiten que no siempre estamos atentos a sus peticiones de ayuda, a su necesidad de comunicarse con nosotros. Algunas escenas incluso nos pueden alertar de cómo los adultos a veces también caemos en un uso excesivo de Internet, o la importancia de desarrollar actuaciones de prevención y reacción, tanto en el ámbito escolar como familiar o comunitario.

 

Trabajar estas temáticas con los adolescentes

Desde Internet Segura for Kids siempre os animamos a hablar en familia de todos estos temas, adaptándonos a la edad y madurez del menor,  para que no existan barreras a la hora de que los jóvenes quieran pedir ayuda o consultar las dudas que les puedan surgir. Más aún, si ya han visto la serie, podemos aprovechar para guiar estas conversaciones hacia la reflexión sobre estas temáticas y elaborar conclusiones positivas.

Es imprescindible fomentar su capacidad crítica, a través de la mediación parental y la sensibilización sobre estas problemáticas, y conocer los riesgos más importantes que pueden encontrarse en Internet. Así, podrán identificar cuándo están frente a un problema y sabrán cómo enfrentarse a ello.

 

Hablar en familia de todos estos temas para que no existan barreras
a la hora de que los jóvenes necesiten pedir ayuda

 

Además, la productora de la serie ha lanzado algunos vídeos cuyo objetivo es que los más jóvenes lleguen a reflexionar sobre estos contenidos. Están disponibles en sus redes sociales o en la propia plataforma.

Para el aula, en los artículos películas y series para trabajar los riesgos de Internet y una tutoría diferente: hablemos con los alumnos de sexting, ciberbullying y grooming, podéis encontrar algunos consejos para guiar la reflexión y el aprendizaje de estos temas con vuestros alumnos, y recursos para poner en práctica lo aprendido.

Por último, hay que aceptar que a pesar de toda esa labor de comunicación, en ocasiones los adolescentes no tienen suficiente confianza para hablar de estos temas con su familia o sus profesores, por lo que es importante poner a su alcance otras vías o personas de referencia para solicitar ayuda si lo necesitan.

 

Y en vuestro caso, ¿han comentado algo vuestros hijos sobre la serie? ¿Os parece interesante trabajar estás temáticas con los adolescentes? Contadnos vuestra opinión en los comentarios.